El 3 de junio de 1979 fue asesinada Gladys del Estal Ferreño por el
guardia civil José Martínez Salas en Tudela (Navarra), durante una
manifestación antinuclear.
El asesino fue juzgado el 14 de diciembre de
1981 en Pamplona en un proceso lleno de irregularidades, y condenado a
sólo un año y medio de cárcel, que no llegó a cumplir, casi la misma
pena que la de un ecologista de Mallorca (un año de cárcel), cuyo único
delito fue colocar una pancarta de protesta contra la muerte de Gladys.
Más información